El hampa no perdonó a Neiro Enrique Vargas Godoy, un vigilante de 43 años.
Vargas caminaba por la avenida 36 del sector Santa Rosa de Agua, ubicado en la parroquia Coquivacoa, cuando un asaltante le cortó el paso y bajo amenazas de muerte le exigió sus pertenencias.
El humilde vigilante no tenía nada valioso, de interés para el hampón, y este, lamentablemente, decidió accionar su arma contra Neiro.
Una bala impactó en el cuello de la víctima y fue suficiente para arrebatarle la vida. Se desangró hasta morir en una acera cercana. El despiadado hecho de sangre ocurrió a las 9:00 de la mañana del martes 13 de agosto.